¿Qué estudia la lógica aplicada?
La lógica es una ciencia que se encarga de estudiar las bases de la argumentación y la inferencia, es decir, la evaluación de proposiciones y razonamientos que permitan llegar a conclusiones asertivas en sus respectivos temas. Las inferencias se suelen conocer mejor en base a su clasificación en; deducciones, abducciones e inducciones.
En consecuencia, la lógica se encarga de estudiar los esquemas o formas de pensamiento y su respectiva validez, siendo usada constantemente como fundamento para el marco teórico científico en el que se rigen todas las disciplinas científicas.
¿Qué estudia la lógica aplicada?
La lógica aplicada se puede referir a un tipo general de la lógica que se centra en analizar la argumentación, buscando distinguir la realidad de los argumentos y premisas expuestas. Su estudio encuentra una aplicación más directa y certera en el sector del derecho e incluso en el sector de la política.
Lo que este tipo de lógica guarda, es que permite a los especialistas del derecho a distinguir la veracidad de argumentos y testimonios, logrando discriminar las teorías y evidencias necesarias para poder solventar un caso en particular, en base a la moral, justicia y por supuesto, la lógica que reside tras estas.
Sin embargo, la lógica aplicada puede hacer alusión a otro concepto en el respectivo marco de las ciencias, refiriéndose a, como su mismo nombre lo puede indicar, la aplicación directa de la lógica a otras disciplinas, siendo el ejemplo más característico el uso de la lógica en la matemática.
Como se mencionó anteriormente, la lógica es una ciencia que conforma una parte fundamental del estudio científico, siendo la base primordial del modelo científico moderno en el cual se encuentran suscritos todas las ciencias vigentes, de modo que no resulta extraño observar la aplicación de la lógica a problemas que surgen en los campos de investigación, siendo esto conocido como un ejemplo de la lógica aplicada.